La hechicera y el tiempo

Cuenta la leyenda que hace millones de años el tiempo no estaba fragmentado como lo conocemos hoy, sencillamente transcurría sin ningún tipo de ataduras. Todos vivan libres de horarios y sin el peso de los años ya que no existía el pasado ni el futuro, vivían en el presente. Cierto día una hechicera frustrada por su monótona vida trató de convencer a los habitantes de la tierra que con un solo pase de magia podría encapsular el tiempo para que lo usaran como quisieran. Sin embargo, su verdadero plan era poder contabilizarlo para así sacar ganancias propias.

Los humanos creyeron que había enloquecido, ya que era imposible capturar el tiempo. Ella en cambio, insistía en ser capaz de tan incomprensible acto y les propuso un acuerdo: Si lograba dominar el tiempo para que lo pudieran usarlo a su antojo ellos tendrían que dedicarle parte de sus vidas para servirle. En ese momento a todos les pareció fascinante dominar el tiempo y muy justo servir a la hechicera. Fue así, que en un gran pase mágico hizo aparecer un reloj, el calendario, el pasado y el futuro en cada rinconcito de la tierra.

Una vez que todos comprendieron los nuevos conceptos quedaron maravillados con su bondad, sin embargo, ella no perdería «tiempo» en cobrarles su parte del trato. Fue cuando los pobladores de la tierra se convirtieron en esclavos de su propia vida y de la hechicera, quien se hizo fuerte y poderosa gracias a sus nuevos colaboradores.

Muchos años tuvo que transcurrir para que un humano le reclamará a la hechicera rever el trato porque sentía que ya no era justo. Ella que estaba rodeada de lujos y disponía de los humanos a su antojo aceptó darles una tregua y les propuso un nuevo acuerdo: Con cada año nuevo tendrían la posibilidad de recomenzar sin rutinas, sin trabajo excesivo y podrían decidir en qué invertirían su tiempo, pero en cambio, todo aquel que no pudiera liberarse estaría incumpliendo el trato y por consiguiente tendría que seguir brindándole su tiempo.

Desde entonces en cada año nuevo hombres y mujeres se reúnen con sus seres queridos para recordar esta leyenda y liberase de las ataduras del tiempo viviendo el presente. Sin embargo, el plan de la hechicera fue tan bien ideado que aún hay quienes siguen cayendo en su trampa.

Gabriela Motta