Doña María

—Buenas tardes, Doña María!
— Para usted serán buenas, yo estoy aquí envuelta en mis pensamientos y la verdad cuanto machismo hay en ellos. ¿Y sabe lo que es peor? que tengo 82 años y todavía seguimos igual.

—Ya la veía yo muy concentrada, si quiere mientras riego las plantas puedo prestarle mis oídos, dicen por ahí que se compartimos el sufrimiento alivianamos la pena.

—Ay mijo! sabe que cuando yo era chica mi vecina Elsa le contó a mi abuela que su abuelo la andaba manoseando. Mi abuela no le dijo nada y la mandó que se fuera para su casa. Pero cuando ella se fue se dio la vuelta y me dijo:

—Pobre de don Néstor, siempre fue un hombre tan trabajador. Sacudió la cabeza levantó las manos al cielo y me preguntó:

—¿Qué habrá hecho para que dios le mandará una nieta tan mentirosa?

Gabriela Motta

15/11/21

Montevideo

Historietas cortas para secundaria